Nunca te merecí.

En el fondo sabía que esto pasaría. Sabía que no sería un para siempre, que no seriamos eternos, pero nunca llegue a pensar que sería por mi culpa, supongo que nunca estuve a tu altura, eres demasiado para mi. Sé que lo nuestro sería perfecto, sería una de esas historias de película, con un bonito final, una de esas historias que la gente envidia y que el día de mañana yo podría contar a mis nietos, pero quizás no sea el momento. Creía ser fuerte, pero quererte tanto y no tenerte se ha convertido en mi peor pesadilla. Levantarme diariamente pensado que ya queda menos para verte no es fácil, saber que tengo que pasar día tras día sin ti, no es una rutina apetecible. Me dijeron querer, es poder. déjame decirte que eso es mentira, yo he querido como nunca y no he podido como siempre.
Pedirte perdón, nunca fue mi intención hacerte daño, nunca. Es más, preferiría tu felicidad antes que la mía  lo daría todo y un poquito más porque tú fueras feliz, por que esto fuera algo fácil para ti, pero sé que no lo es y ese es el peor de todo mis castigos. Te mereces lo mejor, y te prometo que yo no me parezco ni a lo más mínimo a eso. Lo siento, por no saberte querer como tú te mereces, por no ser fuerte y aguantar hasta l final, por rendirme cuando tú nunca lo hiciste, lo siento, no puedo decir otra cosa.
Nunca olvides que te sigo queriendo, tanto como el primer día y que el día de mañana, quien sabe, a lo mejor la historia vuelve a cambiar. Te quiero.